El gotelé es una técnica decorativa que, aunque popular en su época pasada, hoy en día ha quedado relegada en favor de estilos más modernos. Sin embargo, muchas viviendas antiguas todavía mantienen este tipo de acabado en sus paredes. En este artículo vamos a explorar a fondo los diferentes tipos de gotelé, cómo identificar el que tienes en casa, y los métodos más eficaces para quitar el gotelé de tus paredes. Si te enfrentas a las texturas rugosas de las paredes, sigue leyendo para conocer todo lo que necesitas saber.
Aunque el gotelé fue una tendencia decorativa en épocas pasadas, hoy en día muchas personas prefieren paredes lisas. Ya sea que tengas gotelé al temple, con pintura plástica, fino o grueso, ahora conocerás cómo identificar el tipo que tienes en casa y qué métodos utilizar para quitar de manera efectiva. Si decides raspar, lijar, cubrir con masilla o instalar pladur, nosotros re recomendamos un proceso adecuado para obtener el mejor resultado.
¿Qué es el Gotelé y por Qué se Usaba?
El gotelé es una técnica de acabado en paredes que se caracteriza por su textura rugosa, formada por pequeñas gotas o bultos de pintura o yeso. Este tipo de decoración se aplicaba para disimular las imperfecciones de la pared, ya que al tener una textura irregular, ocultaba pequeños desperfectos o grietas que pudieran tener las superficies.
El auge del gotelé fue durante los años 60 y 70 en España, cuando se construyeron numerosas viviendas de forma rápida, el gotelé permitía un acabado rápido para ocultar las irregularidades del enlucido de las paredes. A pesar de su funcionalidad, hoy en día es visto como un acabado anticuado que muchas personas prefieren eliminar en favor de superficies lisas
Diferentes tipos de gotelé ¿Como saber que tipo de gotelé tengo?
Existen diferentes tipos de gotelé, y cada uno de ellos presenta características particulares en cuanto a su textura, resistencia o el tipo de pintura o material con el que fue aplicado. Identificar el tipo de gotelé es fundamental para saber qué método de eliminación será más efectivo. A continuación, describimos los principales tipos de gotelé
Gotelé al Temple
El gotelé al temple es uno de los más comunes como antiguos. Se realizaba con pintura al temple, un tipo de pintura a base de agua y yeso que da una textura relativamente suave a las paredes. Las gotas formadas por este tipo de pintura son menos gruesas y más fáciles de raspar en comparación con otros tipos de gotelé. Además, debido a la naturaleza de la pintura al temple, las paredes son más absorbentes, el gotelé se puede remover más fácilmente con métodos de humedad y raspado.
¿Cómo Identificarlo? Si al mojar la pared con agua notas que la textura comienza a ablandarse o que la pintura se disuelve parcialmente, es muy probable que tengas gotelé al temple.
Gotelé con Pintura Plástica
Este tipo de gotelé es más reciente y mucho más resistente que el anterior. Se realiza con pintura plástica, una pintura a base de agua con un acabado más grueso y duradero. Las gotas en este tipo de gotelé suelen ser más grandes y resistentes, lo que hace que sea más complicado eliminarlo. La pintura plástica tiene la capacidad de sellar la pared de forma efectiva, por lo que, en comparación con el temple, no se disuelve al mojarla.
¿Cómo Identificarlo? Si intentas raspar una pequeña parte del gotelé con una espátula y ves que es difícil quitar las gotas o si la pintura no se disuelve con agua, es muy probable que tengas gotelé con pintura plástica.
Gotelé Fino
El gotelé fino es una variante más sutil de esta técnica decorativa. Las gotas son más pequeñas y el acabado es menos rugoso. Aunque es menos invasivo visualmente, sigue siendo una textura que muchas personas prefieren eliminar para conseguir paredes completamente lisas. Este tipo de gotelé se puede eliminar con lijado o cubriendo con masilla de forma más sencilla que otros tipos.
¿Cómo Identificarlo? Si al pasar la mano por la pared sientes una textura rugosa pero no demasiado pronunciada, es probable que se trate de gotelé fino.
Gotelé Grueso
Por último, el gotelé grueso es el tipo más texturizado y notorio. Las gotas formadas por la pintura o el yeso son mucho más grandes, creando un relieve considerable en la pared. Este tipo de gotelé es más difícil de disimular o eliminar debido a su espesor o la cantidad de material necesario para cubrir o raspar las gotas.
¿Cómo Identificarlo? Este tipo de gotelé es fácil de identificar, ya que las gotas son grandes y la textura es muy evidente a la vista.
¿Cómo quitar el gotelé y alisar todo tipo de paredes?
Quitar el gotelé puede ser un proceso laborioso, pero con los métodos correctos es posible lograr paredes completamente lisas. A continuación, te presentamos los métodos más comunes para eliminar el gotelé, así como algunos consejos prácticos para una reforma integral exitosa
Raspar el Gotelé
Este método es ideal para el gotelé al temple. Se trata de humedecer la pared con agua para ablandar la pintura y luego utilizar una espátula o rascador para eliminar el relieve de las gotas. Este proceso es bastante efectivo con paredes que tienen gotelé de pintura al temple, ya que el agua ayuda a descomponer el material.
A tener en cuenta, Asegúrate de no mojar en exceso la pared, ya que podrías dañar el yeso debajo de la pintura. Usa movimientos suaves controlados al raspar.
Lijado
Si el gotelé es fino o está hecho con pintura plástica, el lijado puede ser una buena opción. Utiliza una lijadora eléctrica para acelerar el proceso y papel de lija de grano grueso para remover las gotas. Este método genera mucho polvo, por lo que es importante proteger el área de trabajo cubriendo los muebles tambien trabajar usando mascarilla para evitar inhalar el polvo.
A tener en cuenta, Para evitar llenar la casa de polvo, cubre bien el área asegúrate de trabajar en una habitación ventilada.
Cubrir con Masilla
Si no quieres lidiar con el raspado o el lijado, otra opción es cubrir el gotelé con una capa de masilla o pasta niveladora. Este método es ideal si las gotas no son demasiado gruesas. Aplica una capa fina y uniforme de masilla con una llana o espátula, deja secar, luego lija la superficie para obtener una pared lisa para pintar.
Importante, Si el gotelé es muy grueso, es posible que necesites aplicar varias capas de masilla, dejando secar entre capa a capa, para conseguir un acabado liso.
Instalación de Pladur
Si el gotelé es extremadamente grueso o simplemente prefieres un método más rápido, puedes optar por cubrir las paredes con placas de pladur (yeso laminado). Este sistema consiste en instalar placas directamente sobre las paredes texturizadas, evitando así la necesidad de raspar o lijar. El pladur te proporcionará una pared completamente lisa para decorar
Consejo útil, Este método es más caro y requiere mano de obra especializada, pero es una excelente solución si prefieres evitar el polvo y la suciedad.
Algunas recomendaciones antes de quitar el Gotelé
Evalúa el estado de la pared antes de empezar, Si la pared tiene desperfectos graves o el gotelé es muy resistente, podría ser más conveniente contratar a un profesional.
Protege el área de trabajo, Eliminar el gotelé puede generar mucho polvo Cubre los muebles, las ventanas para evitar que se dañen o ensucien.
Paciencia, El proceso puede ser lento, especialmente si decides raspar o lijar las paredes tú mismo. No te desesperes y sigue las instrucciones paso a paso para obtener un buen resultado. también te aconsejamos contratar una empresa de reformas, a veces dejar los proyectos en manos de profesionales es la mejor elección.